Esta vez no sonó el despertador, si no, los gritos de sus
hermanas.
-¡DESPIERTA, SEÑORITA STYLES!- gritaron encima de su cama,
la despertaron entre abrazos y gritos, fue un horror- ¡A PONERTE GUAPA!
-¿Pero qué coño…?- que te despierten a las siete menos uno
de la mañana encima de ti y gritando en tus oídos te ponían de mala leche-
¿Cómo que a ponerme guapa? Me voy al insti, no a una discoteca.
-¡¡HARRY ESTÁ ESPERÁNDOTE ABAJO CON SU COCHE!!- gritó April.
-¡QUIERE LLEVARTE AL INSTITUTO!- gritó la otra.
-¿Que Harry está abajo esperándome?- Emma se desperezó de la
cama y se asomó a la ventana. Efectivamente, el coche de Harry estaba abajo-
oh, no no no. ¡No puede verme así!
-Tranquila, ya te he visto- rió Harry al entrar en la
habitación.
Las gemelas también rieron, dieron un beso a su cuñado y se
marcharon de la habitación.
-Para mí siempre estás hermosa- replicó el chico sonriendo-
venga, hoy te elijo la ropa.
Harry abrió el armario de su novia y examinó la ropa. Cogió
unos vaqueros rasgados y una camiseta roja con volantes.
-Me gusta este conjunto- dijo él lanzándole la ropa a Emma-
póntela. Me voy a la cocina a preparar el desayuno.
Emma sonrió como una tonta, se desvistió y se puso la ropa
que eligió su novio. Se puso unas botas altas y bajó a desayunar.
Sus hermanos estaban esperando el desayuno, su padre estaba
leyendo el periódico y su madre fregando los platos, como siempre. Harry estaba
poniendo cinco tazas de cola-cao en la mesa.
-Somos cuatro, Harry- dijo Emma. Solo estaban Aroa, April,
Justin y ella.
-¿Y yo? ¿No puedo desayunar o qué?- bromeó el cantante.
-Pensaba que ya habías desayunado- sonrió. Emma se sentó
entre Justin y Harry.
-Creo que debería venir más a menudo- comentó Justin- así
nos haces el desayuno.
-¡Justin!
-Era broma, era broma- rió su hermano.
Todos los que estaban presentes rieron.
-Oye Harry- esta vez habló su padre- ¿entre mi hija y tú,
tenéis algo?
Emma se quedó petrificaba. ¿Qué decía? ¿La verdad? Miró a
Harry que también estaba muy nervioso.
-Eh… Esto…- Harry tartamudeaba.
-Sí, papá- contestó ella, ya tomada la decisión. Dirá la
verdad- somos novios.
Su padre dejó de leer el periódico, su madre de fregar y su
hermano se atragantó con una galleta. Las niñas miraron a su hermana, con los
ojos abiertos. No sabían que Em se atrevía a decirlo.
-¿Tenéis un… romance?- preguntó Amy, nerviosa.
-No- contestó Harry seriamente. Quería caerles bien a los
padres de su novia- lo nuestro va en serio.
-¿Pero desde cuándo salís juntos?- preguntó Justin.
-Desde hace dos semanas- contestó Emma.
Hubo un silencio muy incómodo. Todos estaban tensos. ¿Qué
tenían que decir?
-Tened cuidado- respondió Amy al final- y no hagáis ninguna
tontería.
-No lo haremos- respondió Harry- cuidaré de su hija.
Los padres de Emma se marcharon de la cocina. Se quedaron
los cuatro hermanos y Harry, desayunando.
-Pensaba que no te ibas a atrever a decirlo- dijo April.
-¿Tú lo sabías?- pregunto Justin, su hermana asintió- ¿Por
qué no me lo has dicho?
-Era un secreto nuestro- contestó Aroa.
Emma pellizcó las mejillas de sus hermanas cariñosamente.
-Muchas gracias- y subió a su habitación a cepillarse los
dientes.
Cuando acabó de cepillarse, se fue a su habitación. Cogió un
abrigo negro muy bonito y la mochila del colegio. Bajó al vestíbulo, Harry
estaba esperándola.
Su novio abrió la puerta y salieron a fuera. Caminaron
silenciosamente hasta el coche.
-Me ha encantado que vinieras…- dijo Emma al sentarse en el
coche, al lado de Harry.
-Nos queda menos de una semana- respondió el cantante de los
rizos castaños- tenemos que aprovecharlo.
-¿Mañana vendrás?- preguntó, contenta.
-Pues va a ser que no- suspiró- tenemos ensayo. Te prometo
que el jueves sí.
-Vale- respondió.
Durante el trayecto al instituto, estuvieron hablando sobre
las comidas que les gustaban. Fue un paseo de coche estupendo.
-¿Sabes? Ayer conocí a una chica- comentó la rubia- sois sus
ídolos.
-¿Ah sí? Pues me gustaría conocerla- contestó su novio-
¿Cómo se llama?
-Marii. Pero su favorito es Liam- dijo ella- tranquilo, que
mi favorito eres tú- bromeó.
Llegaron al instituto. Harry se puso la gorra y gafas de sol
para taparse. Aparcaron enfrente de la puerta.
-Faltan diez minutos. Venga, ya puedes salir- dijo él- ¿hoy
sales a las cinco?
-No, sólo los lunes y miércoles. En realidad acaba a la una,
como siempre, pero hay clases de apoyo hasta las cinco y a veces nos quedamos.
-Vale. Hoy a la una te buscamos a ti y a tus amigas y os
llevamos a un restaurante- dijo- si quieres trae a Marii también- y rió.
-Vale. Pero depende cómo se ponga, si se pone a dar saltitos
y gritar, no- se rió también y se marchó hacia dentro del edificio.
Entró al insti, faltaba ocho minutos para que abrieran las
puertas. Divisó a Guiomar y a Hay charlando debajo de un árbol.Guiomar la saludó. Caminó hacia
ellas.
-¡Hola!- gritó alguien detrás suya, se giró- ¿Por qué hoy no
has venido en metro?
-Ah, hola Marii- respondió Em, se había pegado un susto
tremendo- no, hoy he venido en coche. Mañana voy en metro.
-¡Vale!- y se fue con unos chicos de su clase.
-Oye, ¿Qué haces hablando con Marii?- preguntó Guiomar
cuando Emma se acercó hacia ellas.
-Hablar- respondió, Guiomar nunca había sido así- ¿Qué crees
que hago?
-Te dije que esa chica me cae mal- espetó su amiga enfadada.
-Hola Emma- saludó Hay- Guiomar, no seas así. Ella me cae
muy bien, es muy maja y simpática.
-Claro, claro. No es simpática. Se HACE la simpática-
resopló la mayor del grupo.
-¿Pero acaso te hizo algo?- preguntó Emma indignada, no le
gustaba nada el comportamiento de su amiga.
En ese momento sonó el timbre. Empezaba un nuevo martes en
el instituto.
-Odio los horarios de los martes- gruñó Guiomar y entró en
el instituto sin hacer caso a sus amigas.
-Está muy rara…- susurró Hay a Emma.
Ambas amigas entraron a sus clases, Guiomar ya estaba allí.
La primera clase que tenían era Español. Fue bastante
entretenida, el profesor Rodríguez les enseñó canciones españolas. Emma se
acordó mucho de Belén.
Pasaron dos clases más (música y biología) y llegó el
recreo. Guiomar se fue de la clase corriendo, no esperó a Hay ni a Emma.
La rubia recogió los libros y fue hasta el sitio de Hay.
-¿Y a esta que la pasa?- preguntó Emma, la actitud de su
amiga no le gustaba nada.
-Es por lo de Marii…- respondió Hay entrecerrando los ojos-
la cae mal, no sé por qué.
Las dos amigas fueron al recreo, Guiomar no estaba allí.
-Supongo que estará en la cafetería- dijo Emma suspirando.
Las dos se sentaron debajo de un árbol para darse sombra.
-¡Hola chicas!- saludó Marii se acercó a ellas y se sentó.
-Hola- respondieron las otras dos.
-Aiii, tengo unas agujetas horribles- se quejó la recién
llegada, con short cortos- acabo de hacer educación física y hemos estado corriendo durante 40
minutos seguidos.
-Joder, yo no puedo aguantar ni cinco- rió Emma- oye, los
chicos me han dicho que si te vienes esta tarde a comer fuera.
-¿Qué chicos?- preguntó Marii, no tenía ni idea de quién
hablaba Emma.
Ella se acercó a Marii y sususurró:
-One Direction.
A Marii casi le da un ataque de ansiedad. Estaba
nerviosísima.
-¡No, no, no!- gritó Marii super contenta- ¡¿De verdad que
han dicho eso?!
-Sí… Pero cálmate que nos van a oír- tranquilizó Emma- a
ellos no les gustan las fans locas. Tienes que comportarte con normalidad.
-Vale- respondió la hiperactiva.
Hay y Emma sabían que era imposible. Si a ellas les costaron
muchísimo tranquilizarse cuando estaban con ellos, a Marii mucho más.
Sonó el timbre, se había acabado el recreo. Ahora tocaba matemáticas
y lengua. A Emma le dio vergüenza volver a ver al profe de Mates. Pero éste no
hizo ningún comentario sobre el día anterior.
~~~
Llegó el timbre tan esperado por los alumnos. Un día menos.
Guiomar no había hecho sus tonterías habituales en clase, ni
había dirigido una palabra a sus amigas. A la salida del instituto, Emma la
agarró y la preguntó:
-¿Te vienes con nosotras a comer fuera con los chicos?
-No. Tengo profesor particular- contestó ella- los martes y
jueves.
Y se fue con pasos rápidos.
Hay y Marii se acercó a ella.
-¿Dónde están?- preguntó Marii, estaba temblando- aaaaaaaai,
¿Qué le digo a Liam?
-Habla como si ellos fuesen normales- contestó Hay- no te
pongas nerviosa. Cálmate.
Un coche pitó en la carretera.
-Son ellos- dijo Emma. Agarró a las dos chicas por la muñeca-
vamos.
Las chicas montaron en el coche. Sólo estaba Louis, Harry y
Liam.
-Hola Marii- dijo Louis- encantada, nosotros somos…
-¡One Direction! Lo sé, lo sé, lo sé- gritó ella eufórica-
¡¿quién no lo iba a saber?!
Emma miró a Marii y la susurró:
-Cálmate…
-Me ha dicho Hazza que soy tu ídolo- comentó Liam- me gusta
conocer fans.
Marii no podía hablar, le abrazó fuertemente y le besó en la
mejilla.
-Bueno…- dijo Hay, aquella escena le daba un poco de
vergüenza- ¿a qué restaurante vamos?
-Al Tommy Mel’s- dijo Louis- nos dijiste que te encantaba y
hemos decidido ir.
Hay les sonrió.
-¿Dónde están Niall y Zayn?- preguntó Marii.
-Zayn está con su novia y Niall… No sé, no le apetecía
venir- dijo Louis.
-¿Qué no le apetecía venir?- dijo Hay sorprendidísima- ¡Pero
si a Niall le encanta comer fuera!
-Ya… Últimamente está rarísimo- comentó Louis.
-¿Y Guiomar?- preguntó Liam.
-Con su profe particular- respondió Emma.
-¡¡Ya hemos llegado!!- gritó eufórica la morena.
Una hora y media después, todos estaban llenísimos. Habían
comido muchísimo. Como había dicho Hay, la comida estaba deliciosa. Marii se
había tranquilizado un poco y se llevaba muy bien con Liam.
-Tendremos que venir más a menudo- dijo Louis.
-Sí, pero con Niall, seguro que le encantará- dijo Hayley.
-Jo…- protestó Marii- me hubiese gustado que también vengan
Niall y Zayn. ¡One Direction al completo!
-Bueno- dijo Emma- por lo menos has conocido a Liam.
-Sí- se sonrojó y le miró. Ambos se rieron.
El teléfono de Hayley comenzó a vibrar. Ella vio la pantalla
y sonrió:
-Es Anna.
Hayley descolgó el móvil y puso el altavoz para que lo
oyeran todos.
-¡Anna!- gritaron todos dándola una sorpresa. Todos menos
Marii, que no la conocía.
-¡Chicos! Qué alegría oíros- dijo una voz conocida en la
otra línea- ¿Qué tal estáis?
-Muy bien, aquí en el Tommy Mel’s- respondió Harry.
-¿Qué tal estás?- preguntó Louis.
-Aquí todo muy bien- respondió Anna- pensaba que iría peor,
pero en Italia he hecho nuevos amigos y es muy divertido.
-¡Eh! Pero no nos olvides- bromeó Emma.
-No, no. Claro que no- rió ella- imposible olvidaros.
-Oye Anna, ¿esta noche hablamos por skype?- preguntó Hayley.
-¡Claro! ¿A las diez te parece bien?
-Sí, perfecto.
-Bueno Anna, te dejamos- dijo Louis- que tenemos que pagar
la cuenta.
-Un beso chicos- se despidió la italiana- no olvidéis de que
os quiero mucho- y colgó.
Los chicos pagaron la cuenta y se fueron del restaurante.
Montaron en el coche y se dirigieron a las casas de las chicas.
-¿Dónde vives, Marii?- preguntó Liam.
-En Flowering daisies- contestó ella.
-Me encanta tu pulsera- dijo Emma a Harry.
-Me lo has regalado tú- rió- a mí también me
encanta. Es el mejor regalo que me han hecho nunca.
Emma besó a Harry con suavidad.
-Te quiero.
-Yo también.
-Marii, ya hemos llegado a tu casita- dijo
Louis- encantado de conocerte.
Louis y Marii se estrecharon la mano. La
chica se bajó del coche y se despidió de sus amigos.
-Espera- dijo ella retrocediendo del coche-
quiero un autógrafo vuestro.
Los tres rieron y cogieron un papel de por
ahí y firmaron.
-Gracias- dijo ella cuando la tendieron el
papel- espero volver a veros.
-Yo también espero volver a verte- dijo
Harry.
-Es maja la chica, ¿eh?- comentó Liam cuando
Marii se marchó.
-Sí- dijo Louis- y además de maja, guapa.
Todos rieron. Más tarde llegaron al piso de
Hayley, que se despidió de todos. A continuación llegaron al chalet de Emma.
-Un besito- abrazó a sus dos amigos y besó a
su novio en los labios.
-El jueves te busco en tu casa a las siete-
recordó él.
~~~
Anna tiró su móvil al suelo. Estaba angustiada. ¿Por qué no
les había dicho a sus amigos la verdad?
ESTA
MAÑANA, A LAS 9…
Entra a clase cabizbaja, sin mirar a nadie. Se sienta en su sitio
y saca los libros nuevos que compró ante ayer.
Oye risitas detrás suya, ella saben que se están burlando. Anna levanta la cabeza y todo el mundo la mira raro mientras cuchichean. Ellos saben que Anna sufre, lo saben muy bien. Siguen riéndose y mirándola con cara de asco como si fuese un mostruo. Anna baja la cabeza y se limita a ver los libros. No quiere sufrir más. ¿Por qué a ella? ¿Les parece bonito hacerla sufrir?
Se acaban las tres primeras horas, empieza el recreo. Cuando el
profesor se va, los alumnos se acercan a Anna.
Ella recoge los libros, sin hacer caso.
-Eh gorda- comenta uno con una gorra- ¿Qué tal te va en Italia?
-Seguro que de puta madre, ¿verdad, gorda?- insulta otro.
El de la gorra, como ve que Anna no le hace caso, coge los libros
que guardaba ella en la mochila. Mira los libros y tira todos al suelo, menos
el de física y química, que lo rompe. Ya no son nuevos. Todos se ríen. Anna se
agacha y coge los libros que están tirados en el suelo, esparcidos. Coge el
libro roto y lo guarda en la mochila. Se levanta y camina hacia el patio. Sigue
caminando, cabizbaja y pasa delante de ellos. Se ríen a carcajadas, una vez más. Una vez más han conseguido humillar a Anna.
Anna parpadea, sabe que va a llorar de nuevo. Pero no debe llorar, pero las lágrimas salen incontroladamente. La arden los ojos y nota cómo se deslizan las lágrimas lentamente por su mejilla. La escuece mucho.
Anna parpadea, sabe que va a llorar de nuevo. Pero no debe llorar, pero las lágrimas salen incontroladamente. La arden los ojos y nota cómo se deslizan las lágrimas lentamente por su mejilla. La escuece mucho.
La duele mucho, se pasa la mano
por las mejillas, ella es fuerte, no debe demostrar ninguna debilidad. Se
olvida de eso y frota sus ojos con fuerza. Se cruza con otra persona
y la lanza otro insulto. ‘Gorda’, lo mismo de siempre. Aprieta los ojos,
intenta retener las lágrimas, esto duele. ¿Por qué tu estómago se revuelve
tanto a causa de una simple palabra, a causa de ‘gorda’, a causa de un insulto
de una persona a la que no has hecho nada? Anna maldice en voz baja y trata de
librarse ese pensamiento. Pero el pensamiento la deja claro que no va a
marcharse, se quedara aquí. Grabada en tu mente. Como si fuera un tatuaje. La gente se ríe, han
conseguido dañarla, han conseguido hacerla llorar.
¿Por qué los pasillos deben de ser tan largos?
~~~
Sonó el timbre en casa de Guiomar, la chica se levantó y
abrió la puerta de su casa.
-Hola- saludo Marcos Bill.
-Hola, profesor Anderson- saludó ella.
-Marcos, por favor- dijo el profesor y entró a la casa.
Los dos subieron por las escaleras hasta llegar a la
habitación de la chica.
-Bueno, ¿Qué quieres que demos hoy?- preguntó Marcos.
-Mates. Las derivadas, que no me entero de nada- respondió
Guiomar.
Después de una hora explicando y haciendo ejercicios, la
chica se enteraba poco a poco. Ya pillaba el truco
-¡Joder!- gritó ella de repente- si esta chupado. El
profesor de mates no explica ni la mitad mejor que tú.
-Será que no prestas atención en clase- dijo él- porque es
un viejo amargado- bromeó.
Los dos rieron.
-Pues sí… Es un amargado de la vida, ayer regañó a mi mejor
amiga por estar distraída, pobre… Menuda bronca se llevó.
Guiomar se entristeció al hablar sobre Emma, había sido una
borde.
-¿Qué pasa?- preguntó Marcos, se había dado cuenta ante el
repentino cambio de humor de su alumna.
-Me he enfadado con mi mejor amiga…- dijo ella- se ha hecho
amiga de una chica que me cae mal y me enfadé con ella.
-Te caerá mal porque tienes celos- dijo él- dala una
oportunidad a la chica.
-¿A Marii? No. Me cae como el culo.
-¿Pero porqué? ¿Acaso te hizo algo?- preguntó.
Emma hizo la misma pregunta, ¿acaso hizo algo Marii? La
verdad es que no… Pero tenía una mala espina sobre ella. La caía mal, y no sabe
porqué.
-Vale… La daré una segunda oportunidad- ofreció la rubia- la
pediré perdón.
Pobre Anna, esta pasando muy mal, deberia contar a sus amigas... A maria jose me da mala espina -.-!
ResponderEliminarPero creo que es buena, no se...
Bueno, espero que subas muy pronto
Ya, Anna lo está pasando muuuuuuuuy mal. Pobre :'C (me costó escribir esta parte, ya que describir sentimientos que nunca me han pasado es bastante imposible)
EliminarY lo de Marii... Si Guiomar piensa que es mala, ¿porque iba a serlo?... Ella es buena... O no :P
Un besi (:
(OTRO ANONIMO ¬¬)
Pues a mi Marii tambien me da mala espina.. No se, es como que tiene demasiado interes en el grupo... Y pobrecito Niall, que esta todo triste... Me da penita el pobre :(
ResponderEliminarBeeesoos, y sigue asi (si vas subiendo un capitulo por dia como ahora, ya me tienes super contenta jajaja) espero impaciente el proximo capituloo
Laura A.
Veo que si Guiomar le da mala espina Marii, a vosotros también XDD, que fieles la sois C:
EliminarEs cierto, que Marii oculta un secreto (como veis en los personajes secundarios), pero no tiene porque ser mala... O si :P
Jejeje, yo hago lo que puedo, capítulo por día, pero porque ahora no tengo exámenes. Pero la semana que viene... Lo tenemos claro, sorry D:
Un beesi
SeXy MaRiI
ResponderEliminarEres guarr@ o que, desgraciad@
Eliminaroooo curioso
ResponderEliminarlos padres debemos orientar a nuestros hijos y hablar con ellos sobre el bullying
ResponderEliminarNo estoy de acuerdo con el bullying y por eso debemos orientarnos y saber como actuar ante esta situación
ResponderEliminar